¡Ay, ay, ay! Parece que el glamour brilló por su ausencia en la ceremonia de juramento de la princesa Leonor. Y es que el modelito elegido por la famosa diseñadora Isabel Rodríguez ha dado mucho de qué hablar. Sin embargo, no fue solo ella la que sufrió este desastre fashionista, ¡sino que otras dos invitadas también cayeron en la tentación de copiar tan horrendo conjunto!
La falda imposible de combinar
Empecemos por el principio, ¿qué demonios le pasó a Isabel Rodríguez al diseñar esta falda? Parece que hizo una fusión entre un tutú de ballet y una cortina de carnaval. Con volantes multicolores y brillos que deslumbraban tanto como una discoteca de los años 80, esta prenda no logró conquistar a nadie. La pobre Leonor tuvo que hacer todo el juramento intentando no tropezar con tanto tul y lentejuela. ¡Todo un reto!
Por si eso fuera poco, las otras dos invitadas tampoco lograron dar con el clavo al elegir su look. Ambas optaron por calcar la falda de la diseñadora de forma casi idéntica, creando así un trío de terror irrecuperable.
El top de dudas y polémica
El problema no fue solo la falda, ¡el top tampoco se quedó atrás! Con una mezcla de colores y estampados imposibles de describir, parecía que Rodríguez había decidido resumir todas las tendencias de la historia de la moda en una sola prenda. El resultado fue un caos visual que dejó a todos desconcertados. ¡Incluso los fotógrafos no sabían dónde enfocar!
Las dos invitadas que decidieron emular a la diseñadora también eligieron tops cargados de estampados y colores llamativos. Parece que querían pasar desapercibidas, ¡pero lograron todo lo contrario!
¿Moda o pesadilla?
La pregunta que todos nos hacemos es: ¿estamos ante un nuevo estilo revolucionario o simplemente se nos ha ido de las manos? La moda siempre ha sido una forma de expresión, pero en este caso, parece que las palabras «exceso» y «desastre» son las más adecuadas para describir estos modelitos.
Esperemos que la princesa Leonor aprenda de este «incidente fashion» y pueda escoger, en futuras ocasiones, outfits mucho más acertados y elegantes. ¡Ánimo, Leonor, el mundo de la moda es todo un desafío!
